“Cuando vine en los 70, las unicas parejas que habia en Costa Rica eran, Con El Fin De decirlo Cristalino, entre un prototipo macho macho asi como la ‘loca’”, relata el investigador. Los roles nunca necesariamente respondian a un tema de identidad, sino que eran papeles que habia que asumir Con El Fin De entrar en el esparcimiento sensible.
Alguna cosa similar Asimismo lo cuenta otro astro preciso en la historia sobre la colectividad gay asi como lesbica en San Jose: Ana Vega, propietaria del bar La Avispa . La novia, una mujer lesbiana, recuerda Algunos de los primeros conjuntos identificados igual que tales: unas hembras que se apodaban las Bufalos (agujero al masculino) a principios sobre los 70. El apelativo es un parpadeo humoristico a la gama de television Los Picapiedra , asi como su logia de las Bufalos Mojados.
En aquel conjunto, de unas 15 parejas, algunas tenian una femineidad irrefutable, entretanto que las parejas se masculinizaban al limite.
Ana explica este endurecimiento por la urgencia de supervivencia: era laborioso acontecer chica en la avenida asi como aun lo era mas acontecer lesbiana. Adoptar actitudes de macho funcionaba para alejar a los buscapleitos asi como, en ocasiones, Con El Fin De irse a los golpes cuando exteriormente indispensable.
Existieron bares sobre agrupamiento homosexual en aquella temporada en San Jose, como el Johnny’s, en las 60; y la decada mas tarde surgiria el Vimo asi como El Ferrocarril (primordialmente de lesbianas), asi como otros bares gay igual que El Loro Azul, El automovil Rojo y Jaguares, dentro de otros. Jacobo Schifter inclusive afirma que la vida nocturna homosexual en San Jose era mas potente que la de Madrid en los ultimos anos de vida de Franco.
Aquellos eran centros a puertas selladas, en los que se entraba solamente al darsele el visto bueno al comprador detras de asomarse por la portezuela en la entrada principal. Solian acontecer bares minimos ubicados en casas extremadamente estrechas, en donde habia que entrar casi a tientas entre tinieblas.
“Yo creo que aquello reflejaba demasiado como nos sentiamos por dentro”, metaforiza Ana Vega.
Ana Victoria Vega, de 61 anos, seria duena del mas primitivo bar para usuarios homosexuales en el estado: La Avispa. Igualmente fue el primer negocio en su modelo que se convirtio en un bar a puertas abiertas.
Un artilugio habitual en aquellos anos era la presencia de un reflectante rojo o blanco que se encendia cuando habia una redada policial. Aquellos eran bares en los que se bailaba y, en las comercios en las que la clientela era tanto de lesbianas como sobre gais, varones y mujeres sustituian de compadre a la senal de la luz para formar parejas heterosexuales.
Esa era parte de la vida nocturna de por lo tanto: paranoica asi como forzada al ridiculo.
Las entrevistados acusan que las autoridades cometian abusos policiales y pedian sobornos. Afirman que el interponer la denuncia conllevaria a exponerse como homosexuales.
Unicamente pudimos dar con denuncias al respecto a partir de los 90. Sobre hecho, Tenemos un informe sobre gracia Internacional que llama la consideracion al Gobierno sobre Rafael garbo Calderon en “torturas asi como otros tratos crueles, inhumanos o degradantes” en contra de personas travestidas por pieza sobre policias.
Regresando a la clandestinidad, Algunos de los mayores brillos de los 70 lo trajo un veinteanero gay que, al igual que Jacobo, habia vivido en EEUU en los 60. A su regreso, el se encontro la cultura gay oscura y desprovisto sazon, demasiado ocupada en las chismes e hasta, segun el novio, homofobica por la entusiasmo con la que se atacaban dentro de unos y otros. Por eso, empezo an invitar a grupos sobre colegas a su residencia. Refiramonos an el novio como Roberto porque, aun hoy por hoy asi como con mas de 70 anos, teme a la homofobia.
Una caracteristica sobre la estacion era la division, tanto dentro de las lesbianas y las gais como dentro de las mismos congeneres. Conforme confirmaron todo el mundo las entrevistados, como en cualquier poblado chico habia demasiado espacio para la maledicencia.
Roberto quiso contender contra eso. El novio empezo an estructurar reuniones pequenas que terminaron convirtiendose en las fiestas que Con El Fin De gran cantidad de eran las mas fastuosas de aquellos tiempos en Costa Rica. El novio solia hacer reuniones para Halloween y, en diferentes ocasiones, hacia “Noches sobre Hollywood”, con shows de transformistas en las cuales conjuntos organizados imitaban escenas de el cinema.